El otro día mientras en un momento de descanso miraba una serie animada de super héroes pensaba en la obligación de estos super héroes, ellos luchan no por sus intereses, no luchan por sus sueños u objetivos.
Estas personas luchan por aquellos que no pueden cuidarse ellos luchan por las personas las protegen las SALVAN, ahora volviendo a la vida real y al campo espiritual en la antigüedad y hoy día existen estos super héroes pero no con la clásica apariencia de el hombre fuerte musculoso con su traje ajustado de colores llamativos y que vuela por la ciudad luchando con criminales, los super héroes de hoy en día no tienen identidad secreta por el contrario buscan revelar su identidad quieren que el mundo sepa de donde vienen y quieren que el mismo poder que en ellos reposa este sobre todos. Estos super héroes son los siervos de Dios en ellos reposa un poder que supera al de cualquier super héroe y este grupo es mas poderoso que los vengadores, liga de la justicia y cualquier otro grupo, (jaja eso es conocimiento de la infancia) ellos tienen un poder que va mas halla a cualquier otra cosa y creo que ya saben estimados lectores a que me refiero es un poder sin igual un poder que hace milagros y maravillas un poder que para obtenerlo se debe renunciar de si mismo.
Este poder es el Espíritu Santo y aquellos que lo llevan dentro de si luchan hasta el cansancio por los sufridos un verdadero héroe salva, un verdadero héroe nunca es vencido, un verdadero héroe desea la victoria del pueblo de Dios y nunca pero nunca se deja llevar por la emoción y el egoísmo no desea provecho para si mismo sino para salvar su mente se enfoca en la misma meta que el mayor de los super héroes (Jesucristo).
Estas personas pueden ser llamados de super héroes porque su mente es solo salvar a los demás aun teniendo sueños, objetivos y demás ellos colocan primero los sueños de Dios ellos dicen heme aquí yo iré a donde sea por aquellos que sufren y ellos llevan vida a quien esta muerto, paz al atormentado, felicidad al triste y libertad al oprimido.
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